Me llamo Duque y soy un perrito de la calle. Mi historia es igual a la de muchos como yo, que fui recibido con mucho cariño cuando fui cachorrito, me consentían y me hacían sentir especial pero a medida que fui creciendo me convertí en un estorbo para mi familia. Aún no entiendo por qué pero un día me subieron al auto de la familia y lo que pensaba que sería un lindo paseo se convirtió en pesadilla cuando me dejaron abandonado en un parque. Esperé por horas y horas pero nunca regresaron por mí. Supongo que pasaron días y meses porque ahora estoy flaco y me duelen las patas traseras porque algunas malas personas se divirtieron golpeándome con un palo.
Ahora vivo en un parque, escondido, porque los serenos no me quieren ver allí, y como cuando encuentro algo con qué llenar mi pancita. Tengo la esperanza que algún día una buena familia me quiera recibir en su hogar y prometo ser fiel y portarme muy bien. Soy tranquilo y me gusta hacer muchos cariños a las personas. Ya no voy a crecer más y tengo un año de edad aprox.
Si puedes darme una oportunidad de entrar en tu corazoncito, reenvía mi historia para darme una oportunidad de vida.