Soy Pepito y hoy, despues de tanto tiempo, tuve un día realmente feliz. Hoy recibí cariño y no golpes. Antes (como soy un perrito súper bueno) fui usado como carnada en peleas de perros. Estas heridas que tengo en la cabeza me duelen mucho pero me han dicho que me voy a curar, ahora sólo necesito un hogar ¡ayúdame a encontrarlo por favor!
Los señores que me usaban para enseñarle a otros gordos como yo a pelear decidieron que ya no les servía más cuando mis heridas no cerraron solas. Me dejaron en un grifo de San Isidro y allí supe que Dios sí existe. Conocí por primera vez lo que es el amor...gente que me recibió con cariño, me dieron comida y no basura ¡y hasta me pusieron una manta! me hicieron olvidar el dolor de mis heridas.
Mi vida de antes fue triste. Siempre fui un problema para mis "dueños" como soy un cruce de pitbull querían que fuera malo pero nunca pude. De día mis hermanos compartían conmigo el hambre, la sed, la soledad...pero de noche cuando llegaban los dueños los obligaban a pegarse y como yo no sé pelear me usaban para que practicaran sus ataques conmigo clavando sus dientes en mis orejas. Como he llorado rogándoles a los dueños que se detuvieran. Nunca logré convencerlos.
Ahora estoy de forma temporal con una pareja de esposos muy buenos y me han dicho que me voy a curar completamente. Ya quiero salir, correr, descubrir el mundo que nunca supe que había tras esas paredes donde hacían pelear a mis hermanos, donde muchos de ellos murieron, donde los humanos se burlaban mientras mis hermanos agonizaban.
Si quieres ayudarme a ser feliz, adóptame, necesito saber cómo es tener un hogar. Tengo 3 añitos y soy cruzadito. Estoy esterilizado y vacunado. Soy muy bueno y manso y hoy descubrí que me gusta acurrucarme en los brazos de las personas. Llama al 2768125 y 996412195 o escribe a heidipaiva@gmail.com
Atentamente,
"Pepito"